24.2.08

No me entiendo, en serio.

Estoy feliz, y no lo entiendo. Debería estar triste, frustrado, enojado o mínimamente defraudado de mi mismo. Eso dicen mi razón y mi sentido común frente a los hechos, sin embargo me encuentro calmo, de buen humor, y hasta con un leve aire de felicidad absurda...

Este finde tenía planes. Planes por los que había silenciosamente rechazado otra invitacion, también muy buena. Era la oportunidad (no voy a decir "única", porque tampoco quiero exagerar) de comenzar algo -más que una amistad- con alguien... evidentemente algo poco común en un sujeto solitario y antisocial como yo... me encontraba ansioso y miraba la oportunidad con optimismo (aunque también con algunos nervios, claro) como pocas veces lo había hecho antes...

PERO (siempre hay un pero) debido a un resfriado agudizado por mi hipocondría, y a cierto autosabotaje -producto de mi personalidad pasivo-agresiva- que me llevó a reducir la comunicación a un mínimo, todo quedó en la nada. Nada.

Aun así, siendo que debería odiarme a mi mismo, estos días estuve retornando a algunos de mis viejos vicios de geek/otaku y con eso alcanzó para mantenerme de buen humor... peor aun, incluso ahora al ponerme a reflexionar conscientemente en esto no logro deprimirme ni sentirme mal...

¿Tan frío me volví? ¿Acaso he logrado abrazar a mi otaku interior de forma tal que ya no me importa ser un solitario looser total de 26 años? ¿De verdad estoy bien o es sólo apatía? ¿Se puede ser TAN apatico...?

No creo que sea que ya nada me importe, o de lo contrario no debería siquiera estar escribiendo esto... ¿o será este mi último intento de...? No sé... Que soy un looser, que soy frío, que soy apático... eso siempre fue así, pero también es cierto que cosas como esta solían deprimirme con extrema facilidad... ¿será que hice "click" y ahora de verdad ya nada me importa?

O quizá... quizá lo falso era la ansiedad, quizá en realidad esto nunca me importó tanto, quizá hasta no lo deseaba, y entonces el autosabotaje hasta resultó ser bueno... pero no, no quiero creer eso... aunque ya no sé qué creer...

¿Acaso inconscientemente habré alcanzado el nivel de comprendimiento suficiente para aceptar las verdades budistas sobre el sufrimiento, logrando con eso desprenderme de todo lo que pudiera deprimirme y entrando entonces en un extraño estado de serenidad zen...? Nah...

¿De verdad habré hecho algún click, o en realidad siempre fuí igual de frío y despreocupado pero no me había dado cuenta? ¿Será que por fin me convertí (o quizá siempre lo fui) en un auténtico Soujiro Zeta, capaz de ignorar todo lo que me oprime el corazón y de sonreir constantemente...?

No lo sé. Sólo sé que tengo razones para deprimirme, para sentirme patético, para actuar como un puto emo melancólico... y aun así no me importa, estoy bien. No sé si habré tocado fondo y aceptado mi pateticidad al punto de que mi cerebro y mi corazón dejaran de sentir, o si esto sea el colmo del cinismo, no lo sé...

Probablemente este post luzca deprimente, pero no lo siento así. Yo estoy inusualmente bien, y eso quizá debería asustarme, pero tampoco puedo sentir miedo. Estoy bien, y no es sarcasmo ni respuesta obligada. No me entiendo, pero estoy bien.

7.2.08

Todos flotan

(el título de este post debe leerse con la voz de IT, el payaso asesino)(en la foto, yo soy el único desubicado con el nick de otro color... si seré jodido...)

El finde pasado me fui de nuevo al Tigre con la gente de Cosplarg. Todo muy lindo, pileta, asado, fogón, corte de luz, predicciones del futuro con Prometeo y Mr.Deja Vú de médiums... lo que se encuentra en cualquier campamento, bah... Pero la razón por que posteo esto aquí y bajo este título es por la siguiente fotografía:
...que acompañada a esta otra, del camping anterior:
...decidídamente nos deja cuestionándonos qué habrá de raro en los campamentos de Cosplarg para que (ya no una vez, de casualidad, sino en ambos, recurréntemente) osemos quebratar la ley de gravedad de manera tan descarada.

Primero fue Shoko, levitando junto a los postes, y luego Vanechan, caminando sobre las aguas. Una cual Jesucristo, el otro cual David Copperfield. Ambos llevándole la contra a Newton.

Tras una ardua investigación `patafísica, he llegado a la conclusión de que esta anomalía es perfectamente lógica y esperable: No se puede sacar a un grupo de freaks de enfrente a sus computadoras y llevarlos al aire libre sin esperar reacciones adversas en la tela de la realidad.

Es así, llevar un grupo de cosplayers citadinos geeks al campo es ir en contra del orden del universo, por razones obvias. Tanto la anulación de las fuerzas gravitatorias de Shocko, como el súbito cambio del peso específico de Vanechan son evidentemente meros efectos colaterales del verdadero daño que debemos haber hecho a la estructura de la existencia misma. Debemos fervientemnete investigar estos sucesos más profundamente. Esto es sólo la punta del iceberg...

Con algo de suerte, en el próximo campamento creamos una máquina de movimeinto perpetuo... o colapsamos el universo y acabamos como en una pintura de Dalí y sus relojes, lo que ocurra primero.